SOBRE TUS MANOS

No hablarè en este breve texto
de la infinita agricultura de tus manos
ni tampoco de tu supina devociòn por la cosa domèstica
mucho menos de tus pruritos maternales
o de cuando me tomas de la mano al cruzar la calle
dirè mejor de las lujuriosas mariposas
que brotan de tus lìneas quiromànticas
al inicio de las caricias amatorias
de tu magia digital para encender el fuego
para estimular los corceles de mi carne
desde el cuenco convertido en nido para el pàjaro
transformado en serpiente emplumada
fogosa criatura mitològica al encuentro de su madriguera
mientras tus dedos rosaditos y nerviosos de uñas filosas
con sutileza delinean mis oscuras rayas testiculares
y tambièn mis mùsculos pectorales, el cogote y la espalda
son tus manos querida casi de artista
que màs que tocarme hacièndome y rehacièndome
me convierten en mùsica de antiguas elegìas
de ritmos arcanos y percusiones primitivas
prestidigitadora del placer y del encanto, ¡abra cadabra!

Miguel Ángel Chinchilla