domingo, 14 de febrero de 2010


A QUIEN DIOS GUARDE
Y DE QUIEN DIOS ME GUARDE



Dios te guarde de mí......que te reclamo....que te llevo en la sangre.....
que te llamo.
Dios te guarde de mí......que me consumo y te enarbolo.

Dios te guarde de mi......Dios me guarde de ti
que no somos compatibles en el horóscopo chino
y estamos por ello destinados al fracaso.

Dios te guarde de mí
que hago camino al andar.

Dios me guarde ti
Don Juan innato.

Dios te guarde
de mis ansias y mis manos
de mis bocas
de mis sueños y mis noches.

Dios me guarde de ti
señor lejano

Dios te guarde mi
por que
te amo.

MARISOL BRIONES

DONJUÁN

Este hombre
este donjuán
supo escuchar mi voz en el silencio
supo mirar colores en mi luto
y encontrar luz en mi mirada.

Este donjuán
supo escribir con símbolos y signos.

Como el gran Iniciado
supo encontrar la clave del secreto.

En noche de luna tierna
preparó la tierra.
Con eclipse de mar
sembró en laberintos.
Con luna asiática
hizo los injertos
los puentes colgantes.

Y con magia chilota
conjuró luna llena .


Este donjuán
misterio y acertijo
constancia y miel
abrazo en llama
Zupay Zupay

Dador de vida
camino y certidumbre.

Este donjuán
metafísico, mefistofélico
andino, europeo y arabesco.
Este donjuán
el hombre que yo amo.

MARISOL BRIONES

jueves, 11 de febrero de 2010





EL HOMBRE QUE YO AMO

El hombre que yo amo
quiere ser cigarra
yo quiero ser entonces
la subterránea savia que lo nutra.

Tiene hábitos semiclandestinos
y aunque comprensibles
yo quiero que sea un sol
que no se apague.

Se complica la vida
por soñar en rojo
pero hay marcha común
en nuestros pasos.

A veces
elige entre las sombras
confunde mi flor con mariposa.

Eso se debe
a que pasa encerrado
en un Salón Azul
que para nada es cielo.

El hombre que yo amo
tiene muchas edades
mucha vida vivida y por vivir.

Él sabe que llevo desde antes
sus secretos en el pecho.

Que puedo acompañarlo
en esa sociedad de buenos modales
y falsos discursos
pero que prefiero las tardes
observando la ciudad bajo la lluvia
poblados los dos de húmedos besos.

El hombre que yo amo
ha cambiado a la mujer
que escoge o abandona
por esta que lo aguarda
desde aquel día que duró muchos años
desde el ayer que es nuestro ahora
en este hoy que es nuestro
siempre. Marisol Briones.

LOS AMANTES, DE EDUARDO GALEANO


Ellos son dos por error que la noche corrige.

Eduardo Galeano

A PROPÓSITO DEL DÍA DEL AMOR

Cada 14 de febrero se celebra a nivel internacional el día del amor y la amistad.
En ocasiones pasadas hemos hablado de su nacimiento en las festividades de Los
Lupercales romanos, su transformación con la intercesión de Valentín, quien desafiando los decretos del emperador Claudio casaba a jóvenes parejas en secreto bajo el ritual de la Iglesia.
Como a través del tiempo se ha venido celebrando en distintas latitudes o como desde el siglo XIX de la mano de los norteamericanos el dios dinero acabo por convertir esta fecha en un próspero negocio.

Ahora queremos conversar más sobre el amor, su luz y sus sombras o como lo denomina Aldo Carotenuto
Eros y Pathos
Matices del sufrimiento en el amor
No es exagerado decir que, salvo raras excepciones, todos hemos sentido alguna vez los efectos del enamoramiento. Todos somos -querámoslo o no- el resultado del Eros. Lo que tal vez no llegamos a comprender plenamente es la cuota de dolor y sufrimiento que acarrea esta sublime y humana experiencia. ¿Por qué tememos al amor? ¿Por qué herimos a quienes amamos? ¿Por qué jamás nos sentimos satisfechos cuando amamos?

…El amor es entonces una chispa divina -y con este término entiendo una fuerza que contiene en sí ambos polos de la dicotomía bien/mal- que ilumina por un instante nuestra existencia. Pero aquel instante puede otorgar sentido a toda una vida, porque ha provocado profundas resonancias desde los abismos de nuestro ser: es una especie de fulgor que, en el fluir del tiempo, hace aparecer la dimensión de la eternidad. Pero es una "eternidad" que tiene una vida muy breve. Este estado de gracia no puede durar, porque el ser humano no puede soportar la tensión del conocimiento.

… El amor rompe los diques de la existencia y perturba el orden establecido, por lo que debe ser destruido. Las leyes no pueden prohibir a los seres humanos enamorarse, pero es la sociedad misma la que deja morir a quienes han osado trasgredirlas, trayendo una chispa divina al curso siempre igual y gris de la existencia.

Esta no pretende ser una conclusión negativa sobre el amor, sino una invitación a reflexionar. Debemos darnos cuenta de que estamos desgarrados por una profunda ambivalencia: por una parte, deseamos, anhelamos el amor, por la otra, lo repudiamos porque tenemos temor, y nos refugiamos en la cotidianidad.